Diego Trejo disputó el Provincial de Mayores con Punta Alta, con quien quedó en el cuarto lugar. El jugador de Tolosano dialogó en exclusiva y contó todas sus sensaciones ante este hecho histórico para su ciudad de origen.
¿Cómo viviste todo el proceso con Punta Alta desde el zonal?
Mucho el proceso no lo pude vivir porque llegué un día antes del partido con Bahía. Entrenamos el miércoles los sistemas de juego, tiramos al aro y nos fuimos a descansar. Al otro día tuvimos el partido con Bahía, por eso fue todo muy rápido, el llamado fue porque Francisco Filippa por problemas personales no podía jugar. Y bueno, me llamaron y tuve que reorganizar toda mi vida porque yo no iba a ir a jugarlo el torneo. Así que después del llamado dije que me den unos días a los dos días le contesté que iba, así que eso fue más que nada lo que se vivió en el proceso de inicio.
¿Qué significó para vos y para la ciudad haberle ganado a Bahía?
Ganarle a Bahía es el sueño de todos los jugadores de Punta Alta. Ya se le había ganado pero nunca se lo había eliminado. Si bien Bahía no vino con todos los jugadores que puede llegar a traer, no dejan de ser Bahía Blanca. El año pasado dije que no me iba a retirar sin haberle ganado a Bahía, nunca había ganado con la mayor hasta que sucedió ese 6 de junio, y encima ganarles cuando se nos venían, que me pusieron y en dos jugadas como que se definió el partido, así que fue doble regalo, ganarles y haber metido los últimos puntos fue tremendo. La gente explotaba, había casi 2500 personas en el estadio, así que fue terrible y hermoso. Es algo que se va a recordar por siempre.
¿Con qué objetivos llegaron al Provincial y cómo viste la actuación del equipo?
El objetivo era ganarle a Bahía y a Tres Arroyos. Se logró el primer objetivo ante Bahía y después viajamos a Tres Arroyos en un partido muy complicado, que supimos definirlo paso a paso y logramos el objetivo de clasificar al Provincial el 10 de junio, que quedará grabado en los puntaltense, incluso tengo compañeros que se han tatuado la fecha. Es algo histórico. El equipo fue de menor a mayor, no teníamos jugadores de Liga, llevamos al jugador más joven del Provincial y al más viejo también, todos chicos casi del torneo local, que juegan en la segunda de Bahía, con el refuerzo de Herman Banegas. Todo fue a pulmón, yendo para adelante y jugándoles de igual a igual a todos, sin respetar a nadie. Si bien no se festejan los cuartos puestos, se logró un objetivo gigante para que quede en la historia de Punta Alta, clasificar por méritos propios, sin ser invitados o por ser organizador, perder contra candidatos por uno o cuatro puntos, creo que fue un saldo más que positivo.
¿Cómo te sentiste vos en el Provincial?
Fue una experiencia inolvidable. Los reconocimientos de los dirigentes de las distintas asociaciones que me venían a saludarme y hasta algunos me han pedido fotos porque me conocían de chicos, los recuerdos, encontrarme con ex compañeros que también fueron a la cancha. Creo que fue un broche de oro para todo lo que me fue sucediendo a través de mi vida. Hay cosas que uno nunca las piensa cuando empieza a jugar al básquet, empezar a jugar con un entrenador y casi terminar con el mismo 40 años después. Tener en el banco al capitán de cuando jugamos la Liga, al cual tenía una admiración profunda. Todo es una sumatoria de cosas que me hizo sentirme como si fuera un pibe más de 20. Jugar con mis compañeros, algunos a los que les cambié los pañales, inolvidable.
¿Qué sentís de haber vivido esta experiencia en tu último año como jugador?
Traté de disfrutarlo segundo a segundo. Los viajes de Colón a Pergamino, cantar, levantar psicológicamente a los compañeros cuando estábamos perdiendo y estaban bloqueados, hablarles, decirles que esta es una oportunidad única, que estuvimos a punto de cerrar la historia como hubiésemos querido. Creo que fue un broche de oro para mi vida haber jugado este provincial para mi ciudad, haber eliminado a Bahía por primera vez y llegar hasta el último segundo con posibilidades de jugar una final por primera vez en la historia y salir campeón, que era una ilusión que teníamos todos, se esfumó pero el saldo fue positivo tanto para mi como para mis compañeros. Ellos más, porque tienen muchos provinciales más por delante, aunque no se si se va a seguir con el mismo formato.
¿Cómo ves a Punta Alta a futuro a partir de estos logros?
Punta Alta siempre tuvo un futuro tremendo. Le ha abastecido y abastece de jugadores siempre a Bahía Blanca. Si bien crece a la sombra de Bahía, Punta Alta tiene una autonomía sobre Bahía porque si uno se pone a pensar, cada equipo de Bahía tiene jugadores de Punta Alta. El futuro es tremendo, mis compañeros no pasan, salvo uno o dos, los 25 o 26 años, están en la plenitud de sus carreras, tenemos chicos muy jóvenes. Altura siempre tuvimos y siempre jugamos con la garra que la camiseta roja requiere, y eso nos ha dado un plus siempre. Veo que el futuro de la Asociación de Punta Alta es muy próspero, se están mejorando las cosas, hay dirigentes que se están calentando y arreglando todo esto y en un par de años va a mejorar y mucho.
¿Cómo viste la organización del torneo y que se haya decidido que el campeón sea compartido?
La organización del torneo dio un poco que desear en algunas cuestiones. Está bien que la cuestión económica, más allá de que se organizó en dos ciudades (Pergamino y Colón), me parece que una delegación viaje a la noche una hora, porque estaba alojada a 60 km de la ciudad de origen, me parece un poco descabellado. Es como que La Plata arme un Provincial y aloje a las delegaciones en Buenos Aires, ese fue un punto bastante oscuro en la organización. La atención fue genial, no me puedo quejar por nada porque en el hotel y en las canchas nos atendieron excelente, pero el tema del alojamiento, que en el sorteo hubo algo extraño, el último partido contra San Nicolás lo dirigieron dos jueces cuando en los demás hubo tres. La final fue una vergüenza, uno que ha jugado un montón de provinciales no lo había visto nunca. Antes también jugábamos jugadores profesionales y se jugaba con humedad, sin humedad, un poco más tarde, más temprano, pero se jugaba igual. Ahora esto de que se quieren cuidar las piernas por los contratos, por el representante o por lo que sea, hace que el Provincial baje un poco. Porque así como suben el nivel con la calidad de jugadores que van, las decisiones no las pueden tomar los jugadores, sino directamente que no vayan. Recuerdo que en 1989 se jugó un Provincial en Punta Alta, que ganó Pergamino a una Bahía que era extraordinaria, con Montenegro, Ipucha, Faggiano, un equipazo, todos jugaron igual y nadie «arrugó». Que haya un campeón doble en lo que puede ser el último Provincial de Mayores, me parece que la Provincia de Buenos Aires no se merece una definición de este estilo. Después buscar canchas para ver si se lo podía jugar y llegar a una cancha donde se había jugado anteriormente y decidir no jugarlo, también me parece un punto negro. Son cosas a mejorar, no todo puede salir color de rosas, siempre va a haber algo que manche la situación, pero ya pasó y lo bueno es que lo pude disfrutar.

En Diagonal al Aro desde 2013. Licenciado en Comunicación Social con orientación en Periodismo en 2018. Técnico en Periodismo Deportivo recibido de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social en 2016. Jefe de Prensa de Unión Vecinal de La Plata desde 2015. Jefe de Prensa de la Federación de Básquetbol de la Provincia de Buenos Aires hasta 2021. Redactor en Básquet Plus desde 2021.