Hace varios años en nuestro país que el básquet femenino está en constante crecimiento e incluso se logró la conquista de tener una “Liga Nacional Femenina”, lejos en presupuesto y profesionalización de la masculina todavía, pero atractiva para el público y las chicas, que año a año se vuelcan más a este hermoso deporte.
|Por Agustín Castro Heinken/@agustincastro15 | Foto: Prensa Liga Nacional Femenina
El baloncesto femenino es de las pocas ramas que se desarrolló casi al mismo tiempo que la masculina y, singularmente, con reglas de juego que, aunque inspiradas en las originales del baloncesto masculino, fueron adaptadas a las características motrices de las primeras jugadoras y evolucionaron por separado hasta el último tercio del siglo XX.
El primer encuentro femenino se jugó en Estados Unidos, en el Smith College de Northhampton (Massachusetts), el 21 de marzo de 1893, una universidad privada femenina cuya profesora de Educación Física, Senda Berenson, lo había introducido tras haberse informado de sus reglas directamente del creador, James Naismith. Al ser un centro femenino, las 800 personas del público que asistió a este partido, entre alumnas de primer curso (freshwomen) y las de segundo (sophomore) eran todas mujeres (los hombres no podían entrar).
Senda Berenson adaptó las reglas originales del juego inventado por Naismith a las características de sus alumnas, y estas reglas fueron evolucionando por separado de las del juego masculino hasta finales de la década de 1960.
El primer partido de equipos universitarios femeninos, entre la Universidad de California en Berkeley y la Universidad de Stanford, se jugó en abril de 1896, dos años antes que el primer partido masculino universitario.
Varias décadas más tarde en Argentina, la pelea para vencer al patriarcado no está por fuera del deporte nacional y menos del mundo de la naranja. En los últimos años, las mujeres, con trabajo de hormiga, fueron ganando terreno en un mundo de hombres como es históricamente la dirección técnica y este deporte.
Desde Diagonal al Aro trataremos de romper con este mito, de mostrar en palabras de entrenadoras como Laura González, del Club Tomas de Rocamora de la liga nacional femenina y ex jugadora de larga trayectoria e incluso con pasos por selección nacional; o en la voz de una joven Florencia Gorriti (entrenadora de selecciones de Río Negro y asistente de Jorge Newbery en el torneo federal pasado), sumado a palabras de Santiago Losada, secretario del Tomas de Rocamora y Pro Secretario de la Asociación de Clubes y la reciente campeona de la liga nacional con Deportivo Berazategui, Celeste Cabañez como desarrollan su trabajo contagiando amor por el juego, sus sueños, las falencias de la liga, entre otras cosas que se desarrollaran a continuación.
Laura “Lali” González, mujer y madre de cuatro chicos de menos de doce años comentó que siempre estuvo en su mente dar básquet y enseñar este deporte ya que está en su esencia al criarse en un ambiente empadado de básquet. Su padre fue un jugador y entrenador del club donde ella trabaja, de hecho, la institución entrerriana retiro el número 13 en honor a este ultimo.
Además, Lali explico que: “Las camadas de mujeres entrenadoras vienen muy bien preparadas y con mucha vocación, la inserción es lo que va a costar un tiempo, pero más costará la convicción de quienes eligen mujeres para estar al frente de los equipos. Pero solo es cuestión de tiempo para que esto ocurra”. Por su parte, González dijo que el femenino ha dado un salto de calidad y profesionalismo en la última liga, pero que hay que seguir trabajando entre todos y todas para la profesionalización completa.
Por su parte, la líder de las gurisas aseguró que: “Las camadas de inferiores vienen creciendo de la mano de la competencia”. También dijo que el nivel de las jugadoras se irá levantado de a poco si desde cada rincón del país los amantes del básquet hacemos algún aporte para el desarrollo de las chicas.
Ante la consulta sobre si en esta rama se lucha por la igualdad de género, la entrenadora fue clara: “Si, pero también estamos en una etapa de transición, las mujeres tenemos que convencernos de la igualdad”; también expresó que la lucha para introducir a una mujer en un equipo profesional masculino va a ser dura ya que gran parte de la sociedad no tomó la posta de la igualdad y a la hora de decidir se vuelve al pensamiento machista.
Por otro lado, se le pregunto a Santiago Losada, secretario de la AdC, qué falta para la profesionalización de la Liga Nacional Femenina, a lo que dijo que lo que se necesita principalmente es dinero y que el básquet femenino tenga mayor visibilidad, que los sponsors confíen en poder publicitar un torneo de mujeres y que la liga pueda crecer con la realidad de los clubes en torno a su economía”.
También afirmó que tiene que haber clubes que sean formadores, de clase media o dominantes en lo económico, ya que las estructuras edilicias y las ganas de los mismos están; “Debemos apostar a vender el producto para que gobiernos provinciales y sponsors se acerquen. Hoy en día son muy pocas las jugadoras que pueden vivir del básquet, y que estas deben creer que pueden vivir del deporte pero que se debe solucionar el ingreso económico y convencer desde las bases a las chicas que pueden ser profesionales.”
Laura González paradójicamente es la única DT mujer en toda la liga nacional femenina, desde la institución que trabaja admitieron que nunca se fijaron en ese tema, que tratan la cuestión de género con naturalidad y que se fijaron en la capacidad de la antes mencionada ya que busca mejoras continuas sin buscar ganar como única opción, formar jugadoras pero sobre todo personas desde el mini básquet.
Desde Diagonal al Aro también nos dimos el gusto de dialogar con la ex Estrella de Berisso y actual entrenadora de la selección femenina u13 de La Plata, Celeste Cabañez; La mendocina conto que hay entrenadoras mujeres muy buenas que están poco a poco ganándose su lugar en un ambiente liderado por hombres.
La también experimentada jugadora y campeona de la última edición de la liga nacional argumento que: “Para que sea profesional el básquet es necesario que las jugadoras puedan vivir de eso para dedicarse a entrenar y jugar.”
Cabañez se refirió al básquet femenino platense como un proceso de proyección en constante crecimiento: “las nenas están entusiasmadas, van a campus, ven liga nacional, a la selección, se preocupan por entrenar y superarse”. La DT además mostro la importancia de que las chicas puedan estudiar a la par para tener un sustento una vez retirado y porque les abre la mente para todos los aspectos de la vida.
Por último, Florencia Gorriti, de 28 años; entrenadora de los seleccionados femeninos de Río Negro, se mostró optimista al decir que cada vez hay más competencias, como argentinos, torneos nacionales e internacionales a buen nivel gracias a que se expandió la convocatoria mas allá de Buenos Aires.
Para ir finalizando, Gorriti admitió que: “En las provincias más alejadas de Capital Federal, la situación es distinta ya que para muchos dirigentes el femenino es considerado una molestia.”
Por eso mismo, desde este medio mostramos estas realidades, luchamos por la inserción laboral de mujeres en el mundo de la naranja y por la igualdad social; sobre todo quien escribe estas líneas cree que estas están más que capacitadas para dirigir equipos, clubes y asociaciones.
La realidad está clara, no se puede tapar al sol con la mano, las pibas quieren jugar y se lo merecen. Por eso invitamos a no bajar los brazos, a seguir empujando para cumplir el sueño de muchas amantes de este deporte que hace décadas vienen luchando por una profesionalización femenina que sin duda está a la vuelta de la esquina.
En Diagonal al Aro desde 2013. Licenciado en Comunicación Social con orientación en Periodismo en 2018. Técnico en Periodismo Deportivo recibido de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social en 2016. Jefe de Prensa de Unión Vecinal de La Plata desde 2015. Jefe de Prensa de la Federación de Básquetbol de la Provincia de Buenos Aires hasta 2021. Redactor en Básquet Plus desde 2021.
