«A nadie se le hubiese ocurrido, ni al mismo Manu, llegar a donde llegó»

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Ginóbili en su ceremonia de retiro de camiseta mencionó que jugó con 250 jugadores, más o menos, y que se había tomado el tiempo de contarlos. Lo que nadie del básquet platense se imagina es que uno de ellos sería integrante actual de un equipo en la ciudad de las diagonales y que compartió equipo con Manu en Bahiense del Norte. También se sorprenderán de que jugó con él durante la famosa temporada en la que el club de donde el padre de Ginóbili era el presidente descendió en el torneo local de Bahía Blanca. Ese jugador es Diego Trejo, actual de 45 años y disputando su último año en primera con Tolosano.

|Por Alejandro Malky/@alemalky 

Para poner en contexto, Trejo, oriundo de Punta Alta y reclutado en mini por Bahiense, explicó cómo fue su llegada al club: «Mi llegada se da en 1986 después del torneo provincial de mini. Yo jugaba en Espora de Punta Alta, era alto y malo (mucho no mejoré pero bueno jeje). Allí me vieron tres equipos de Bahía y no se por qué decidí ir a Bahiense del Norte.En ese momento tenía 12 años, me acompañó mi mamá a viajar los 30 km entre ambas ciudades, y uno de los que fue a mi casa a hablar fue Yuyo Ginóbili, el papá de Manu. Ahí me recibió el Oveja (Hernández). En ese año no compartí categoría con Sebastián (El segundo hermano de Ginóbili), Yuyo ya era presidente de Bahiense y había un montón de gente que colaboraba. Era un club que empezaba a crecer, hacía muy poco que se había fusionado y había que hacerlo de nuevo. La gente del club siempre tuvo un ímpetu tremendo para hacerlo crecer. Allí conocí a los Ginóbili, a los Montecchia, a Montivero que tambien es de punta alta y un montón de chicos, hasta cuatro más de mi ciudad habia como Luengo y Carbonell, que jugaban ahí y nos juntábamos para poder viajar.»

Además, el actual interno de Tolosano recordó cómo era la familia Ginóbili en esa época: «Leandro era el más decidido por así decirlo, Sepo fue más tranquilo, en su manera de transmitir en el juego. En las épocas que compartimos cancha con él, al ser un año más grande que yo siempre se daba en los segundos años de él y Montecchia en las categorías. Emanuel era el más chico, estaba todo el día en el club y tenían que echarlo para que volviera a la casa. Bahiense siempre fue una familia y éramos todos unidos, entonces montones de veces nos quedamos a dormir los que éramos de Punta Alta en la casa de los Ginóbili, de los Montecchia, de Botini. Eran chicos que se la pasaban las 24 hs. en el club, vivían a 70 metros de la sede y eso es lo que siempre mamaron de la familia y sus padres.»

A Manu lo recordó de la siguiente manera: «Era muy flaquito, no era muy alto, se lo llevaban puestos todos, pero siempre tuvo ese ímpetu de progresar. Era muy inquieto, estaba todo el día con la pelota, lo tenían que echar los entrenadores del club porque molestaba. Ahora uno se ríe, pero estaba todo el día, los sábados jugábamos y estaba él, el domingo también estaba. Era un club muy familiar, donde todos se ayudaban con todos y daban todo por el club. Emanuel era el más revoltoso de su generación, junto con Amate, Luis Decio, Faure, había varios inquietos,pero el ya sobresalia tambien en ese sentido de que quería saber todo, aprender, y copiaba siempre a sus hermanos. Creo que una de sus metas siempre fue superar a sus hermanos.»

Por otro lado, recordó su paso por la primera de Bahiense junto a Ginóbili en 1994, año en el que perdió la categoría: «Ese año fue raro porque Pepe (Sánchez) y Manu eran chicos. De los grandes ya no quedaba nadie, yo volví a jugar unos meses, uno de nuestros estandartes, que era Cecil Valcarcel, se había ido a jugar a Liniers y como que habíamos perdido muchas cosas. A eso se sumó que nuestro entrenador era primerizo en mayores, Gabriel Schamberger y bueno, había que remarla porque jugábamos contra equipos ya formados, de experiencia, y éramos realmente chicos. Sucedió lo que pasó, lamentablemente no pude jugar esa promoción con Comercial, se que Manu siempre cuenta que lo llamó a Yuyo (el padre) llorando y cuando yo me enteré me dolió mucho y siento que descendí porque fui parte del equipo. Se lo que nos dolió a todos haber descendido, porque sentimos que todo lo que se fue construyendo en el club hasta ese momento se había caído a pedazos.»

Para cerrar, Trejo explicó lo que pensaban de él en esos años en Bahiense: «No pensábamos nada especial. Nosotros esperábamos en los kioscos para conseguir los VHS y ver partidos de la NBA. Todos teníamos modelos a Bird, Abdul Jabbar, Jordan, pero jamás pensamos que él, que era el más chico de todos y estaba sentado ahí con nosotros, le retirarían la camiseta en la NBA. Un nene que tenía corte tasa, morocho, le retiraron su camiseta, a nadie se le hubiese ocurrido, ni a él mismo, llegar a donde llegó y lograr todo lo que logró. Jamás pensamos que iba a ser lo que es, ni se le hubiese ocurrido a nadie, y menos de los tres Ginóbili que sea él que llegara, porque en ese momento no pintaba para nada. Pero su voluntad y persistencia, el ir siempre para adelante, crecer, medirse en la pared, y demás, por eso logró lo que logró, fue fundamental en la carrera de él.»

Estadísticas de Bahiense del Norte en 1994:

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